Esta agencia de Naciones Unidas, presidida por la expresidenta chilena Michelle Bachelet, se pronunció así con motivo de la conferencia internacional sobre el futuro de Afganistán que se inauguró hoy en Bonn, cuando se cumplen diez años de la cumbre celebrada en esa ciudad alemana en 2001, cuando se diseñó el Afganistán postalibán.
El organismo destacó que en la última década se han hecho avances "destacados" en materia de género en Afganistán, como la adopción de una "cuota" que ha permitido que en el actual Parlamento haya un 25 % de mujeres y la adopción de leyes y nuevas políticas públicas para combatir la violencia de género, entre otros aspectos.
Sin embargo, advirtió que los retos que afrontan las mujeres afganas todavía son "considerables" y recordó que según un reciente estudio gubernamental, el 57 % de las niñas del país son obligadas a casarse antes de cumplir los 16 años.
Por ello, las mujeres exigen un proceso de paz más "inclusivo" que les permita tener un "papel activo" en la transición y que su seguridad, "que sigue siendo una amenaza tanto en su esfera pública como privada", se convierta en una "prioridad" de todos los actores nacionales e internacionales involucrados en Afganistán.
ONU Mujeres, que en los últimos meses ha ayudado a las organizaciones de defensa de los derechos de las mujeres a prepararse para la cita de Bonn, añadió que los colectivos de mujeres exigen tener "más que un asiento en la mesa" de negociaciones y poder formar parte del proceso de transición.
Así, las mujeres afganas aprovecharon la cumbre para hacer un llamamiento a la comunidad internacional para que se expanda y se proteja el derecho de las mujeres y niños a tener acceso a la educación, que se defienda su seguridad económica y que se respete su derecho a vivir una vida libre de violencia.
El organismo destacó que en la última década se han hecho avances "destacados" en materia de género en Afganistán, como la adopción de una "cuota" que ha permitido que en el actual Parlamento haya un 25 % de mujeres y la adopción de leyes y nuevas políticas públicas para combatir la violencia de género, entre otros aspectos.
Sin embargo, advirtió que los retos que afrontan las mujeres afganas todavía son "considerables" y recordó que según un reciente estudio gubernamental, el 57 % de las niñas del país son obligadas a casarse antes de cumplir los 16 años.
Por ello, las mujeres exigen un proceso de paz más "inclusivo" que les permita tener un "papel activo" en la transición y que su seguridad, "que sigue siendo una amenaza tanto en su esfera pública como privada", se convierta en una "prioridad" de todos los actores nacionales e internacionales involucrados en Afganistán.
ONU Mujeres, que en los últimos meses ha ayudado a las organizaciones de defensa de los derechos de las mujeres a prepararse para la cita de Bonn, añadió que los colectivos de mujeres exigen tener "más que un asiento en la mesa" de negociaciones y poder formar parte del proceso de transición.
Así, las mujeres afganas aprovecharon la cumbre para hacer un llamamiento a la comunidad internacional para que se expanda y se proteja el derecho de las mujeres y niños a tener acceso a la educación, que se defienda su seguridad económica y que se respete su derecho a vivir una vida libre de violencia.